Vladimir Cerrón
Antes de la llegada de Evo Morales, el 82% de las utilidades por la explotación de los megacampos gasíferos eran para las transnacionales y solo el 18% para los bolivianos, lo que denominó un saqueo, un robo. Gracias a la modificación de la ley de hidrocarburos, la nacionalización y la lucha de los pueblos, invirtió las reglas respecto a la proporción del reparto de utilidades, haciendo que la renta petrolera anual que era de 300 millones USD pase a 5,600 millones USD (min. 10).