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Entrevista a Vladimir Cerrón: «Boluarte no tendrá oportunidad de dirigirse al país el 28 de julio del 2025»

Entrevista a Vladimir Cerrón por Dayana Cieza de Cuarto Poder |27-10-24|

1. ¿Cómo ha tomado el allanamiento a la casa de su madre?

El allanamiento se da en una coyuntura especial en la que el ministro del Interior comete uno de sus errores más grandes al anunciar la captura de un alto líder senderista, lo que resultó en una falacia. Este espectáculo, que denigró a la policía y el ministerio, se trató de cubrir desesperadamente, sustituyéndola con otra posible captura, de la misma que no tenían ni un solo rastro real, reduciéndose a la simple especulación sobre mi paradero.

El fracaso terminó por multiplicarse. Por otro lado, la Fiscalía se prestó para el juego, viendo el momento preciso para vengarse de algunas leyes que la bancada perulibrista propuso y las aprobó en el Pleno del Congreso, sintiéndose de esa forma vulnerados sus herramientas coactivas, con las que hacían abuso de los investigados.

También se ha tratado de un amedrentamiento directo a mi familia, especialmente a mi señora madre, persona de la tercera edad, jubilada, a quien han empujado al ingresar a la casa, encañonándola con armas largas, sujetos que no se han identificado como tal, además de estar encapuchados.

Es la primera vez que un allanamiento se hace con estas características. La fiscal se apareció después y el defensor público nunca estuvo presente, violando la ley vigente.

2. ¿Qué piensa del ministro Juan José Santiváñez, sigue creyendo que hay una falta de liderazgo en el Mininter?

El ministro aprovechó la desesperación de Dina Boluarte para ofrecerle un trato criminal, un “toma y daca”. Santivañez, por interpósita persona, le ofreció a Boluarte desactivar la DIVIAC, unidad de la policía política, a cambio del puesto de ministro.

Una vez designado este señor y cumplido el ofrecimiento, empezó su carrera política propia y desde entonces su agenda está orientada a la pantalla televisiva, pero al pobre le ha salido todo al revés. Él no ha aprendido que las cosas en política no se hacen como uno quiere, sino como las condiciones objetivas las permitan. Lo que lo personifica como un perfecto incapaz, un iluso, un subjetivo, un “figureti”, además de torpe.

3. ¿Qué piensa del papel que cumple Dina Boluarte?

Boluarte jamás estuvo preparada para el ejercicio del cargo, es una autocrítica que asume el partido, especialmente mi persona. Ella es fruto de la improvisación a que nos obligó la inmovilización social, producto de la pandemia. El partido no pudo reunirse en asamblea para debatir las posibilidades más óptimas.

El papel que cumple Dina Boluarte en el gobierno es simplemente “constitucionalizar” el golpe de Estado que le propinó la derecha militar y parlamentaria a un debilitado Pedro Castillo. Boluarte es la expresión material y espiritual de la traición, del oportunismo, del egocentrismo y, a la vez, de una mezcla de soberbia con mediocridad. No encuentro ningún valor en su persona. Ella sabe que es un títere de la derecha, pero mientras eso le signifique economía, ahí estará cómoda.

Tampoco la culpo, ella simplemente es el producto del capitalismo, un sistema donde no hay valores, donde solo cuenta cuánto tienes y cuánto vales. Es falso que este es un gobierno de izquierda, este es un gobierno derechista, con una usurpadora a la cabeza, a quien la historia se encargará de quitarle el título de Presidenta, por haber asumido tras un golpe de Estado y con fraude parlamentario.  

4. ¿Se ha comunicado con la presidenta desde la clandestinidad?

No acostumbro a tener comunicación con alguien que traiciona al partido, los que se han ido podrán dar fe de lo que digo, jamás he vuelto a comunicarme con ellos, para mí pasan a ser gente despreciable en todo sentido. Tengo un alto sentido del valor de la lealtad, sin ella no habría garantía de un proyecto político real. Con los leales podemos mover montañas, con los desleales no movemos ni una pluma.  

5. ¿Qué piensa de los rumores que señalan que ella, la presidenta lo está protegiendo?

Es totalmente falso, Boluarte no puede ni protegerse sola, ni siquiera tiene una guardia propia, la rodea la guardia del sistema, es la forma de cómo el sistema “secuestra” a las autoridades con el pretexto de brindarles seguridad, pero en realidad hacen un trabajo de inteligencia, los van apartando gradualmente de su entorno y de sus bases. Castillo es el mejor ejemplo, capturado por su propia escolta, apartado del partido que lo llevó al poder.

Nadie del gobierno me protege, lo desmiento categóricamente y ese descrédito debe terminar con esta entrevista. Los comunistas estamos preparados para la batalla política en circunstancias abiertas y clandestinas, pero jamás desaparecemos de la escena, así, la clandestinidad es una forma de medir tu real presencia social.

Preferiría entregarme a la injusticia, antes de recibir la protección gubernamental de una reaccionaria, circunstancia que significaría denigrar a Perú Libre, bajarle la moral combativa al partido, llevarlo hasta niveles por debajo del piso, una actitud criminal, antes que suicida, una traición.

6. ¿Qué piensa de la poca popularidad de la presidenta?

Una vez, cuando Dina Boluarte era ministra, le increpé el porqué en casi dos años el gobierno no había construido ni un solo hospital y eso era vergonzoso, no supo qué responder. Lo hice con la autoridad que me da el haber construido tres hospitales y medio, en solo tres años y medio que estuve al frente del Gobierno Regional Junín. Claro que era posible.

La impopularidad de Boluarte no es nueva, ella ingresó a Palacio siendo impopular. El pueblo no estaba de acuerdo con su asunción. Esta característica se incrementó tras los asesinatos en la insurgencia del sur peruano, y sigue en ascenso tras su frivolidad ante la pobreza que cada día golpea más a las clases necesitadas.

Si Boluarte se sostiene por más impopular que sea, es por la bendición norteamericana, dentro de poco los EE. UU. deberá aumentar una estrella más a su bandera que represente al Perú. La derecha y sus instituciones, actúan, como siempre, como celestinas en todo el proceso, beneficiando directamente al poder empresarial y financiero.

7. ¿Qué consejo le daría?

A los difuntos políticos no se les da consejos, sino que se les practica una necropsia para saber la causa del deceso, para que otros puedan aprender qué cosas insalvables te llevan a esa irremediable situación.

Boluarte no tendrá la oportunidad de dirigirse una vez más al país el 28 de julio del 2025, su salida está prevista entre abril y julio del próximo año. Si es inteligente, debe preparar su sucesión en el poder.  

8. ¿Qué piensa de las marchas en contra de las extorsiones, cree que el gobierno lo está maneja si bien?

Considero que la delincuencia no es una maldición que nos ha caído, sino que esta es un producto del desarrollo natural del capitalismo. La industria de la inseguridad ciudadana mueve mucha economía, sobre todo en el ámbito empresarial policial y militar, desde venta de cámaras, armas, blindados, helicópteros, consultorías, partidas secretas, etc., el gobierno no puede matar la gallina de los huevos de oro de quienes lo protegen a sangre y fuego.

Sin embargo, el pueblo que sufre, es el que desea que esta modalidad criminal sea erradicada, pero eso no garantiza que no aparezca una nueva, porque seguimos en capitalismo, en el mercado persa de la oferta, la demanda y la mano invisible, que inclusive se da el lujo de regular la delincuencia.

Respecto al paro de transportes, quienes marcharon contra los extorsionadores, hubo gente infiltrada en la dirigencia y eso terminó por degenerar su agenda. Es la primera vez que aspectos relacionados con la inseguridad ciudadana se culpe al Congreso, ¿a quién le van a hacer creer que con una ley se erradica la delincuencia?, sería un precio muy barato. En realidad, la Policía, a la Fiscalía y el Poder Judicial, son los órganos ejecutores y a ellos debió exigirse el pliego.

Paradójicamente, los caviares que se infiltraron con sus medios, reclamaban que no le quiten su herramienta política extorsiva, oponiéndose a la nueva ley de crimen organizado que ha definido la tipicidad criminal. Inclusive, en un acto delincuencial, los defensores de la legalidad han dicho que no van a acatar la ley. Hemos llegado a niveles de una increíble descomposición institucional.

9. Se dice que el carro de la presidenta fue utilizado para trasladarlo a Ud. por la Panamericana Sur, ¿qué piensa de ello?

Ya le dije que no tengo ninguna comunicación con la señora Boluarte, con su entorno, ni sus funcionarios. Para alguien que está en la clandestinidad sería necio trasladarse en un carro que está a la vista terrenal y satelital, no tiene sentido, es una especulación que no resiste mayor análisis.

10. ¿Es falso o es cierto, estuvo Ud. en el condominio Mikonos, la presidenta llegó a verlo hasta allá?

Es falso. No me preocupa que especulen, pero sí me preocupa el hermetismo de la señora Boluarte, quien no ha dado detalles convincentes de la razón de su estadía en el mencionado condominio, lo que infiere que ahí se realizó una actividad mucho más peligrosa. La hipótesis de haberme visitado, encubierto o trasladado, es solo una cortina de humo.

Además, debemos saber que la persecución a mi persona se ha vuelto un negocio contante y sonante para los malos policías, quienes en cada operativo le asaltan al erario nacional millones de las partidas secretas que nadie puede fiscalizar.

11. ¿Cuáles son los motivos por los que Ud. continúa en la clandestinidad?

El motivo principal que me permite resistir es mi convicción de haber sido sentenciado de manera arbitraria, no solo en un caso prescrito, sino en un caso forzado, donde todo lo que se me atribuye es un “daño potencial” por querer construir un aeropuerto para Huancayo, con capitales privados, que en nada afectó ni un solo centavo al Estado. Estoy convencido de que, en el sistema de justicia, no todos pueden ser manipulados y la verdad se abrirá paso.

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El heraldo negro de Dina Boluarte

Vladimir Cerrón

La derecha no la necesita más a Boluarte porque ya le dio la “constitucionalidad” al golpe militar-parlamentario, promulgó las reformas legislativas que les interesaban como la bicameralidad e incluso, a través de las facultades delegadas, promulgó la “Ley Kenji”. Además de haberse emitido leyes que privatizaron el agua, los yacimientos petroleros, entre otros.

Boluarte es una presidenta que volteó la espalda al pueblo, decidiendo vender su alma a la derecha y a los caviares. Pero, claro, ella no es una derechista orgánica, no pertenece a ningún grupo económico, ni tiene una oenegé como otros poderosos. Por tanto, es material políticamente fungible.

La historia demuestra que para sobrevivir en el Ejecutivo es necesario contar con tres elementos: una bancada parlamentaria, un partido político y sobre todo el pueblo. Sin esos elementos no tiene sentido serlo. Ella se encargó de explotar estas columnas vitales, coadyuvó fraccionar la bancada, fue expulsada de su partido y mandó acribillar al pueblo. El capital político había sido liquidado y estaba pendiente de un hilo muy frágil y peligroso.

Boluarte habrá comprendido que concesionarse a la derecha, pagar a sus medios de comunicación, trabajar con sus cuadros técnicos y ser desleal a su partido, nunca son buena paga. Admita que la derecha la utilizó para derrocar “constitucionalmente” a su compañero de camino, pero lo paradójico es que usted está en el mismo camino. Todo apunta a un nuevo golpe blando.

El “Caso Rolex”, es solo un chivo expiatorio, sin relojes no habrá cuerpo del delito, si no hay este elemento no habrá sentencia, quedaría sentenciar una foto o un vídeo periodístico, caso totalmente atípico. Aquí lo que importa es el golpe político mediático y para ello funciona la policía política, como siempre.

Se sabe que el Ministerio Público está politizado y calcula sus ataques, abusa que no tiene un contrapeso firme en esta «democracia», aunque el único que se acerca es el Parlamento, razón de por qué reculó un posible allanamiento a sus instalaciones ante la denuncia de un congresista y el pronunciamiento de su presidente, lo que no ocurre con el Ejecutivo.

El presidente personifica a la Nación, la imagen del Estado se deteriora con el allanamiento al domicilio presidencial, se inestabiliza la economía y espantan las inversiones, pero para que los poderes fácticos se la jueguen es porque han decidido que el ciclo de Boluarte está concluyendo. Esto implica que a estas alturas deben contar con sus relevos, porque un hecho como este no se improvisa en ninguna parte del mundo.

Cualquier medida que tome a estas alturas la presidenta contra el MP o la PNP, serán tomadas como un acto de revanchismo, por lo que le queda es guardar la calma, aun sabiendo que tampoco es fácil vacarla por el delito imputado al no ser causal de ella, además que el Congreso tampoco quiere cortar su mandato. Lo que se está buscando es una renuncia, ante la orfandad que está escarmentando. 

Lo que le queda a la presidenta es reservar un “botón rojo”, para cuando vaya a renunciar o vayan a aprehenderla, sabiendo además que tendrá que afrontar denuncias más graves como los de lesa humanidad, por lo que su pronóstico es sombrío en todo flanco y no irá sola por ese derrotero, por lo menos lo acompañarán su expremier estrella, algunos policías y militares. Hasta ahora ella no se ha pronunciado.

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