En la Universidad de Chupaca
Vladimir Cerrón
El 18 de abril del 2024 el Congreso de la República aprobó por amplia mayoría la creación de la Universidad Nacional Autónoma de Chupaca (UNAC), iniciativa legislativa del Dr. Waldemar Cerrón Rojas y la Bancada Parlamentaria Perú Libre, considerándose once facultades que irán implementándose hasta ser una realidad concreta, como pedagogía, humanidades, ingeniería ambiental, ingeniería civil, biotecnología, arquitectura, contabilidad, derecho, ciencias políticas, entre otras. Solo queda esperar estos días que la autógrafa sea firmada por el Ejecutivo y publicada en el diario oficial El Peruano, para dar por concluida la conquista.
En la historia universitaria del país debemos considerar que todo centro de formación de ese nivel requiere de una coyuntura política especial que lo acondicione para que la idea sea cristalizada. No puede nacer de un simple deseo, sino de las necesidades imperativas de una realidad concreta, de las condiciones creadas con ese fin, de los hombres que se comprometan con la tarea y de una fuerza política que la encarne.
La Universidad Nacional del Centro del Perú (UNCP), fue una iniciativa de las comunidades de la zona altina de Huancayo, canalizada por el gobierno de la convivencia del Apra y Manuel Prado Ugarteche en 1959. La Universidad Peruana Los Andes (UPLA), fue una iniciativa de algunos profesionales militantes de Acción Popular en 1983, quienes, aprovechando la coyuntura del segundo gobierno belaundista, lograron la ley de creación. Esa es la razón de por qué todos sus promotores fundadores eran de esa tienda política.
La UNAC, que ya es un hecho real, ha sido un clamor del pueblo de Chupaca, de su juventud estudiosa, del campesinado, de sus autoridades locales y algunas personalidades, desde hace varios años, pero que no encontraba la resonancia necesaria para que la idea cuajara. Hasta que se crearon las condiciones «objetivas y subjetivas», estribillo muy repetido por la izquierda.
Perú Libre, un partido provinciano creado en la región Junín el año 2008, ganó las elecciones nacionales el año 2021, sin duda un hecho sin precedentes, logrando que por primera vez la izquierda nacional ingrese a gobernar el país. Esto permitió que el pueblo tenga una bancada parlamentaria, inicialmente de treinta y siete, luego mermada a poco más de una decena, producto de traiciones y transfuguismos. Pero igual, contábamos con una cuota de poder real.
Crear una universidad en Chupaca era una tarea pendiente, por lo que las autoridades locales se presentaron ante la bancada, logrando el compromiso del Dr. Waldemar Cerrón Rojas, congresista nacido en Chupaca, para que fuera el encargado de redactar el proyecto de ley respectivo.
Inicialmente, la pretensión legislativa fue rechazada por la Comisión de Educación. Había que esperar mejores condiciones o crearlas. No fue fácil, hubo que buscar amplios consensos con el tiempo necesario. Llegó un momento en que la cosa se puso difícil, pues una parlamentaria de Junín renunció al Partido, lo que restó fuerzas para las negociaciones políticas con otras bancadas.
El año 2023, se presentaron las elecciones para elegir a la Mesa Directiva en el Parlamento y el congresista Waldemar Cerrón logró ingresar en la Segunda Vicepresidencia, siendo este el punto donde las cosas fueron cambiando. Muchos criticaron su elección, acusaron a Perú Libre de un pacto con el fujimorismo, una calumnia total, sin entender la necesidad que significa ingresar estratégicamente a la cabeza del Parlamento. Hay sectarios que piensan que, si la oposición vota “A”, nosotros siempre tenemos que votar “Z”, como una respuesta refleja e inconsciente, un mecanicismo infantil.
Ante este nuevo escenario, nuevamente se retomó el proyecto de ley hasta lograr su aprobación en la Comisión de Educación. Finalmente, tras la sustentación del congresista Cerrón, el 18 de abril del 2024, el Pleno del Parlamento sometió a votación el Proyecto de Ley N.º 6843-2023/CR, aprobándose por amplia mayoría con 95 votos a favor, 0 abstenciones, 0 en contra, de un total de 130 parlamentarios. Si la derecha hubiera pensado como algunos sectarios de izquierda, simplemente hubieran votado en contra, por ello en política es imprescindible el consenso estratégico.
Esta es la importancia de haber creado el Partido, de la consecuencia de sus cuadros políticos, de la perseverancia de la bancada parlamentaria, del pensamiento de izquierda y, finalmente, del poder. Por eso, Lenin decía: ¡Salvo el poder, todo es ilusión! Bueno, aquí ya no hay ilusiones, el poder nos ha llevado a una nueva realidad, hay una ley, un ordenamiento legal que ha creado la Casa Superior de Estudios.
Chupaca siempre ha sido un pueblo que, en las buenas y las malas, apoyó a Perú Libre y no lo estamos defraudando. Las obras que ejecutó el gobierno regional socialista de Junín, en sus dos gestiones, como los puentes Comunero I y II, el puente Eternidad, el Hospital de Chupaca, los asfaltados integrales de Chongos Bajo y Áhuac, tierra de mis padres, son un modesto legado del Partido, porque fue su Plan de Gobierno que planificó estas obras. Aquí no hay la idea genial de nadie, sino un trabajo conjunto de los mejores hijos del pueblo.
Esta universidad también debe recordar a los grandes hombres que defendieron Chupaca de la invasión chilena, de los que lograron provincializarla y de los que la edificaron paso a paso. Es obvio que esto que narro es solo un eslabón de la heterogénea cadena política, donde todos aportamos, para que la UNAC sea una realidad. Era el momento en que la sumatoria cuantitativa de pase al salto cualitativo, es hora de cantar, además de “En la Normal de Chupaca”, ahora “En la Universidad de Chupaca”.